Una persona que por sus circunstancias no pueda expresarse no significa que no tenga problemas. Eso sí, el profesional de la visión que los evalúe debe estar correctamente formado sabiendo que somos los profesionales los que debemos adaptarnos a sus circunstancias, solo así obtendremos la información necesaria de su sistema y podremos aplicar las ayudas más correctas en cada caso.
La incidencia de problemas visuales en población especial es significativamente mayor que la encontrada en población normotípica. La visión es el sentido dominante para aprender y entender muchas veces el mundo, por ello cualquier ayuda, como puede ser mejorar el rango de movimiento ocular, puede proporcionar mejor calidad de vida.
Os dejamos a continuación un listado de signos que se pueden observar en estos casos y en los que la optometría comportamental puede ayudar:
- Un ojo desviado
- Temblor incontrolado de uno o ambos ojos
- Párpado caído
- No puede mantener el contacto visual
- Cierra o se tapa un ojo
- Le cuesta colaborar
- Camina de puntillas
- Siente atracción por objetos que giran
- Necesita acercarse mucho a las cosas
- Necesita luces muy brillantes o ambientes muy tenues
Estas personas a menudo no responden a los métodos de valoración tradicionales, por ello volvemos a recalcar la importancia del profesional cualificado.
Libertad Novejarque Romero
Óptico-Optometrista Colegiado 17345
Desarrollo mi profesión en Visión de Libertad, aquí he podido especializarme en las evaluaciones completas y la terapia visual
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